Los alcaldes e intendentes advierten que el proyecto de empleo público que se discute en este momento en la Asamblea Legislativa podría terminar subiendo las remuneraciones en los gobiernos locales con menos ingresos del país.
El temor surge por el hecho de que nueve municipalidades del país pagan salarios por debajo de los ¢683 mil mensuales en que se definió el primer tramo de cálculo para el impuesto de renta.
Para el sector, si se llegara a fijar ese monto como salario mínimo, la planilla de esos municipios se incrementará, contrario a lo que busca el proyecto en estudio.
“En la Municipalidad de Jiménez, por ejemplo, el salario promedio es de ¢625.019, mientras que, en Alajuelita, de ¢640.354”, alertó la Asociación Nacional de Alcaldías e Intendencias (ANAI).
Esta organización advierte además que, de aprobarse esa legislación, se traerá abajo el esfuerzo del régimen municipal por bajar el impacto de las remuneraciones en sus presupuestos que, sólo en el último año fue de más de ¢9 mil millones, al pasar de ¢235.949 millones en 2020 a ¢226.673 millones para este año.
“Esta tendencia podría revertirse de incluirse el régimen municipal en la Ley de Empleo Público, ya que dicho proyecto no aclara con datos precisos cuáles son los salarios que conformarán las nuevas familias de categorías salariales”, alerta la ANAI.
A su vez, enfatizó en que las municipalidades están en los últimos eslabones salariales en el sector público, sólo por encima de los ministerios de Seguridad Pública y Ministerio de Obras Públicas y Transportes, con un salario promedio que representa la mitad que el de la Contraloría General de la República, destacó la ANAI.
Finalmente, los alcaldes e intendentes recalcan que “incluir al régimen municipal en la ley de empleo público no generará un ahorro en materia de déficit fiscal, ya que los municipios poseen autonomía administrativa y por ley no pueden gastar más de 40% de su presupuesto en gastos administrativos, incluidos salarios”.
