La Municipalidad de Mora manifestó su oposición a la medida propuesta por el Ministro de Hacienda de aumentar el impuesto a la propiedad de bienes inmuebles del 0,25% a 0,75%, pues advierte que aumentará la morosidad.
A manera de ejemplo, el gobierno local detalla que con el aumento una casa valorada en ¢50 millones que paga actualmente ¢125 mil al año por concepto de este impuesto, pasaría a ¢375 mil anuales, es decir tres veces más.
Esta situación generaría un efecto negativo en el corto plazo en las finanzas municipales y en los recursos de los contribuyentes del cantón y va en contra del principio de la capacidad contributiva de los ciudadanos, enfatizó el municipio.
“Ante la situación económica por la que vive el país, ante la crisis sanitaria los ciudadanos no podrán pagar sus cuentas, aumentando la morosidad en todas las esferas”, alerta.
Además, evidencia que son dos impuestos distintos, ya que la porción que se llevaría el Ministerio de Hacienda no sería para el desarrollo del cantón, por lo que no se vería reflejado en la mejora de servicios, en la infraestructura vial o en la calidad de vida de los moreños.
“Creemos que es una doble imposición, el aumentar en un 200% los bienes inmuebles sería un duro golpe para la población de nuestros cantones, esto traería pobreza, remates y una carga que se distribuye de manera injusta”, dijo Alfonso Jiménez, alcalde de ese cantón.
Así mismo, la vicealcaldesa Ariuna Cabal, comentó que “el mundo, el país y nuestro cantón de Mora, en este momento atraviesa una circunstancia inigualable, provocada por la pandemia del Covid-19, no sólo una crisis de salud, sino también económica, familias afectadas por disminución de jornada o pérdida de empleo, pequeños y grandes comercios, pymes en general, se han visto muy afectados, por lo que, no recibimos de agrado está propuesta del Ministerio de Hacienda, más aún que involucra a los municipios para dicha recaudación, lo cual podría generar un aumento en la morosidad y una afectación mayor en la economía y salud metal de las personas”.
Es por ello que el municipio sentencio que este impuesto no es de recibo ya que tiene un alto costo social y económico no solo para este cantón, también para todo el país.
“Daremos los argumentos técnicos para oponernos al mismo, conformando inicialmente un bloque con las demás municipalidades y de llegar a ser el caso, con todas las fuerzas ciudadanas del país para dar la lucha”, concluyó el gobierno local.