Jorge Alfaro, alcalde de Santa Cruz, considera que, si el gobierno desea desregular el precio del arroz está en todo su derecho, pero insta a que sea un proceso objetivo.
En ese sentido, el líder local puntualizó que la desregulación debe ir acompañada con una política que dé prioridad al producto nacional en el abastecimiento del mercado y que se permita la importación hasta cuando se haya consumido el grano costarricense.
Y es que advierte que, de mantenerse el comportamiento actual en que el arroz nacional se queda de último, se corre el grave riesgo de que se desaparezca al productor nacional.
Para Alfaro, ese escenario sería lamentable para el país y principalmente para las zonas productores de arroz, como el caso de su cantón.
Esto, justificó, no solo porque se perdería la soberanía alimentaria, sino que además porque se generaría una grave crisis económica y de empleo en las regiones productoras.