Los representantes de varias organizaciones municipales solicitaron a las autoridades del Ministerio de Salud sentarse a la mesa de diálogo para realizarle cambios sustanciales al “Reglamento para la gestión regionalizada de residuos sólidos ordinarios en Costa Rica”.
Bernal Vargas Araya, director ejecutivo de la Asociación Nacional de Alcaldías e Intendencias (ANAI) cuestionó el poco margen de análisis que les dejaron a las municipalidades para analizar y presentar observaciones al documento, luego de que se enviara a consulta al cierre de año, cuando el sector público salió al periodo de receso.
La mayor preocupación de los voceros del régimen municipal es el corto plazo que establece el reglamento para que los gobiernos locales pongan en marcha las soluciones a la crisis de desechos sólidos lo cual, en lugar de la atender el problema, podría terminar convirtiéndose en letra muerta.
Por ejemplo, a criterio de Vargas no es viable pretender que las municipalidades implementen en un plazo de 4 años la recolección separada del 100% de los residuos orgánicos, como se exige en el anexo 1 del reglamento.
“¡Qué locura! ¿Cuál país del mundo ha logrado la recolección separada del 100% de los residuos orgánicos? ¿Cómo vamos a cambiar esa cultura de la noche a la mañana cuando no hemos hecho el esfuerzo desde las escuelas y colegios para hacer el cambio de cultura?”, dijo en entrevista con Eco Municipal Radio.
También cuestionó el plazo de un año otorgado a las municipalidades en el transitorio 2 para poner en marcha los parques ambientales necesarios para la disposición final de los desechos.
“¿Cómo vamos a desarrollar esta infraestructura en un año? Estamos hablando de estudios de suelos, estamos hablando de permisos, estamos hablando de toda la tramitología; hablemos solo de la tramitología de Setena que lleva su tiempo y, tras de eso, viene la segunda fase que es el proceso de construcción”, alertó Vargas.
Igualmente, el director ejecutivo de la ANAI enfatizó que el reglamento afectará medidas que rigen en la actualidad y que han sido funcionales, al limitar a solo 50 kilómetros la distancia que pueden recorrer los camiones recolectores para el traslado de residuos sólidos.
En ese sentido, lamentó que el modelo de implementar un centro de transferencia como el que emplea la empresa Tecno Ambientes en Alajuela previo a su disposición final en Miramar, no podría seguir funcionando.
Por último, alertó que el reglamento deja por fuera algunas tecnologías para la disposición de los desechos como el que impulsa Coopeguanacaste de gasificación de la basura para la producción de electricidad.