Las autoridades locales de los cantones de Mora, San Rafael y Poás fueron escuchados por las autoridades de Salud y Emergencias.
Esto luego de que esta tarde se diera a conocer que a partir de mañana se les flexibilizan las medidas sanitarias al pasar de alerta naranja a amarilla.
Sigifredo Pérez, jefe de operaciones de la CNE, explicó que “las modificaciones evidencian el acatamiento y la responsabilidad individual que hemos tenido como sociedad para disminuir la curva de contagio en las comunidades”.
Esta medida les da la posibilidad de ampliar los horarios de atención de los comercios y de circular cinco horas más.
A partir de mañana podrán abrir y circular de 5 de la mañana hasta las 10 de la noche, entre semana, mientras que con alerta naranja debían cerrar y guardar los vehículos a las 5 de la tarde. Por su parte, los fines de semanas podrán hacerlo de 5 a.m. a 7 de la p.m., mientras que en naranja la restricción empieza a las 5 de la tarde.
En las últimas semanas los gobiernos locales de estas localidades habían solicitado explicación a las autoridades de Salud y Emergencias sobre las razones por las cuales les mantenían en la alerta máxima decretada hasta ahora.
Por ejemplo, con cifras en mano Alfonso Jiménez, alcalde de Mora, cuestionó que se les mantuviera en zona naranja, pese a tener menos casos activos que los cantones vecinos.
Por su parte, Verny Valerio, alcalde de San Rafael, Heredia, exigió que se le recategorizara al advertir que ha disminuido considerablemente el número de casos activos y por la necesidad de reactivar el comercio.
“Los comercios de San Rafael ya no dan más, no pueden soportar el peso de las medidas. Estamos comprometidos a redoblar esfuerzos para impedir que la Covid-19 se siga propagando, pero necesitamos que las autoridades comprendan que ya la situación del comercio es insostenible”, había comentado Valerio la semana anterior.