Roberto Zoch, alcalde de Moravia, anunció un borrón y cuenta nueva con respecto a la polémica construcción del edificio municipal del cantón.
En ese sentido anunció que se rescindirá el contrato a la empresa que tenía a cargo la obra, para recontratar los trabajos pendientes a otra compañía.
La construcción de la nueva sede del municipio quedó con un avance del 92%, pero la constructora a cargo sufrió un atraso que superó la penalidad permitida por la ley de Contratación Administrativa.
Es por eso que se deberá romper el contrato, aunque falte tan poco, y buscar fondos para terminar la construcción con otro proveedor, comentó Zoch en entrevista con el programa ECO Municipal.
El alcalde agregó que el propósito es tener el nuevo edificio en operación lo antes posible
Entre los trabajos pendientes están la colocación de un elevador y la conclusión del sistema eléctrico.
Sobre si habrá consecuencias para la empresa que incumplió el contrato, aparte de rescindir el contrato, Zoch anunció que se le cobrará multa por el incumplimiento del contrato, tal como establece el contrato y la legislación.
La adjudicación del edificio municipal se dio en marzo de 2018 a la empresa GSM-Contek, por un costo de ¢504 millones.
