El recorte de ¢22 mil millones al presupuesto para el mantenimiento de la red de carreteras cantonales, le produjo una sensación agridulce a Karen Porras, directora ejecutiva de la Unión Nacional de Gobiernos Locales (UNGL).
Por un lado, consideró positivo el hecho de que los diputados lograron evitar las pretensiones del Ministerio de Hacienda de reducir el presupuesto más allá de lo que les corresponde por la recaudación del impuesto a los combustibles.
Pero, por el otro lado, considera que el recorte impacta directamente en obra pública y en la reactivación económica del país.
“Es un golpe a las finanzas municipales y a la ejecución de proyectos incluso ya contratados”, comentó la directora ejecutiva de la UNGL.
Con una votación de 48 a 1, los diputados aprobaron esta tarde el segundo presupuesto extraordinario de la República.
El presupuesto incluye una rebaja neta total de ₡307 mil millones y la rebaja neta quedó en ¢175 mil millones.
